La tormenta causó $450 millones de dólares (USD) $2 mil millones (2007 USD) y mató a 16 personas en Cuba y en Texas.
Fue la tormenta más fuerte de la temporada.
Se movió rápidamente a través del Atlántico, y se combinó con cizalladuras de nivel superior, aunque no se desarrolló.
Mientras desaceleraba en el oeste del mar Caribe, fue capaz de organizarse, convirtiéndose en depresión tropical el 31 de julio.
Se desplazó al noreste, arremetiendo contra la punta oeste de Cuba el 1 de agosto.