No tiene la forma misma que el exterior de la diáfisis, por el contrario la mayor parte de las veces parece un ovoide muy prolongado; recibe la terminación de los conductos nutricios más grandes, contiene en su interior sustancia reticular en diversas proporciones, según sea el hueso; en pocos, esta sustancia ocupa toda la cavidad medular, en la mayoría corresponde hacia los dos extremos.Esta cavidad aumenta de diámetro a medida que avanza la edad.Estas particularidades de construcción se hallan en armonía con las funciones correspondientes a estos huesos; las extremidades son ligeras y voluminosas, para hacer más firmes las articulaciones, favorecer los movimientos por el menor peso y aumentar la potencia muscular por lo que quitan de paralelismo a los tendones en el momento de insertarse.Existe cavidad medular en la diáfisis, porque así el volumen de la columna es mayor sin aumentarse el peso lo cual beneficia a la resistencia puesto que, conservándose la masa misma, se ensancha la base.El comportamiento biomecánico del hueso, resulta complejo por sus características de ser: heterogéneo, anisotrópico y viscoelástico.
Corte horizontal a través de la
diáfisis
mostrando la cavidad medular de un
fémur
.