Conocía 7 idiomas, además del español: alemán, francés, inglés, italiano, portugués, griego y latín.
En año 1952 fundó el semanario y luego periódico católico Presencia, el cual dirigió por más de 25 años, ubicándolo entre los mejores del continente.
Desde allí formó a grandes periodistas bolivianos y se consagró como destacado editorialista.
Representó a Bolivia ante organismos internacionales en diversas reuniones, conferencias y juntas internacionales orientadas al abordaje de temáticas como control de drogas y lucha contra el narcotráfico, entre otras.
El Parlamento nacional y otras instituciones a las que estuvo ligado en vida, le rindieron justo homenaje.