Hotel El Algarrobico

El inicio de la construcción en 2003 del hotel El Algarrobico por parte de la promotora Azata del Sol en terrenos del parque natural urbanizables suscitó una gran polémica a partir de 2005 cuando llegó al Ministerio de Medio Ambiente Doña Cristina Narbona, ya que aunque el proyecto recibió todos los permisos necesarios de las cuatro administraciones públicas incluida la propia Dirección Provincial de Costas, la licencia había sido obtenida en los años 80 (cuando El Algarrobico aún no estaba catalogado como parque natural del Cabo de Gata-Níjar), mientras que la construcción del hotel se inició en 2003, cuando esta playa ya era un área protegida.

[1]​ Se convocaron movilizaciones y actuaciones y se denunció el proyecto en los tribunales por parte de asociaciones locales como Salvemos Mojácar,[2]​ apoyadas por organizaciones ecologistas nacionales e internacionales, que desembocaron en primer lugar en la paralización de las obras por orden judicial.

[6]​ Esta sentencia movió a la asociación Ecologistas en Acción a presentar un recurso ante el TS y al colectivo "Salvemos Mojácar" a presentar una querella contra los ponentes de dicha sentencia, así como un incidente de recusación contra los magistrados que han de dictar sentencia sobre la licencia de obras del hotel, alegando que los jueces son objeto de la querella por presunta prevaricación.

El incidente de recusación terminaría siendo desestimado por el Tribunal Supremo al no haberse admitido a trámite la querella presentada contra los magistrados.

[12]​[13]​ Una parte de la población de Carboneras, municipio en el que se encuentra el Hotel, era favorable en un principio a su apertura, debido al subdesarrollo del pueblo:[cita requerida] la economía, a pesar de la fuerte industrialización y desarrollo turístico en las últimas décadas, sigue basada en el sector primario (pesca) y en la estacionalidad turística.