Llegó a ser un próspero bóndi y goði en Ossaby, Landeyjar Oriental.
[1] En un principio lo acogió su tío Ketill Sigfússon, lo crio como a su propio hijo y juró vengarlo si alguna vez alguien lo mataba como pasó con su padre.
Fue Njál quien el enseñó todo sobre la ley y lo convirtió en un gran goði.
El mismo Njáll solicitó al althing la creación de un nuevo goðorð en Hvítaness para poder favorecer su matrimonio, a partir de entonces se le conocería como Hoskuld Hvítanessgodi.
Todo fue bien hasta la aparición del intrigante Mord Valgarsson que aportó cizaña entre ellos.