Höfner siguió siendo una parte de este conglomerado hasta enero del 2005, cuando The Music Group le vendió la compañía a Klaus Schöller, quien ha sido director general de Höfner por muchos años.
La distribución en ese país la retomó una firma de Chicago llamada Classic Musical Instruments (CMI).
Los Beatles se quedaron sin bajista y ninguno de ellos deseaba tomar ese rol en la banda; el trabajo fue asumido por Paul McCartney –quien en ese momento tocaba el piano en el grupo, pues se había quedado sin guitarra–, ya que George Harrison se encargaba de la guitarra solista y John Lennon –que tocaba la guitarra rítmica–, acababa de comprar su nueva Rickenbacker 325, y rechazó asumir el bajo del grupo.
McCartney compró el bajo de inmediato y lo utilizó durante sus primeros años como Beatle.
En 1963, McCartney recibió un segundo 500/1, distribuido por Selmer (la distribuidora británica de Höfner) el cual tenía las pastillas en posiciones diferentes.
Su primer 500/1 reapareció en público en la presentación del video promocional de "Revolution" en 1968, sin el golpeador (que había retirado al iniciar la última gira del grupo, en 1966) y con modificaciones como la pintura, los botones de volumen y una nueva estructura que sujetaba las pastillas.
Höfner ha reeditado varias veces el modelo experimentando con su diseño, pero el más cercano es la reedición '62 500/1.