Hilario Zapata

La fiebre del boxeo se apoderó de Panamá y en los barrios bajos todos veían en los golpes un trampolín hacia la fama.

"Me pusieron los guantes y subí a pelear contra un muchacho que ya entrenaba.

Estaba reciente el antecedente de la pelea que le habían robado a Ernesto "Ñato" Marcel, que en el Lejano Oriente tuvo a su rival por el suelo toda la pelea y al final sólo le dieron un empate.

Recuerdo que salía a correr mientras nevaba, era terrible, el agua se me congelaba en la frente.

El título lo perdía por segunda vez, 4 meses más tarde; sin embargo, en Corea del Sur, cuando le dio la revancha a Jung-Koo Chang lo venció por nocaut en el tercer asalto.

Ni siquiera, la vida desordenada que llevaba hasta ese momento lo mantenía lejos del entarimado.

Se mantenía activo, lo que le brindó una nueva oportunidad titular en diciembre de 1984 ante Santos Benigno Laciar en Argentina, perdiendo por decisión unánime.

Bassa le dio la revancha al panameño en Panamá y el combate fue declarado empate.

Su último combate profesional fue en 1993 por el campeonato peso supermosca del Consejo Mundial de Boxeo, contra Sung-Kil Moon en Corea, donde fue derrotado por nocaut en el primer asalto.

Estuvo metido en problemas de drogas tras 43 combates ganados, 10 derrotas, 1 empate y 15 nocauts.