[2] Se desempeñó como asesor político en la embajada de Cuba.
[5] Tras el rescate de rehenes, Ogura fue a México donde trabajó en la embajada japonesa en dicho país.
[8] En 2000, ante el diario El Comercio, Ogura denunció que dos emerretistas habían sido capturados y luego ejecutados.
[9] En 2001, Ogura escribió una carta a las autoridades peruanas donde declaró que tres emerretistas estaban vivos y habían sido ejecutados por los comandos duranta la operación.
Posteriormente, ante la Comisión de la Verdad y Reconciliación (CVR), Ogura ratificó sus declaraciones.