Hermanas de la Caridad del Verbo Encarnado

[2]​ Monseñor Claudio María Dubuis, escribió a Marie Angelique, Superiora de la Orden del Verbo Encarnado en Lyon, Francia, solicitando religiosas que atendieran y cuidaran a los enfermos e innumerables niños que sufrían en Texas.Aunque si desde un principio las actividades de la congregación se limitaban específicamente a la atención de enfermos en los hospitales, en 1948 abrieron una institución educativa, sumando a ello las actividades en los orfanatos.Las Hermanas del Verbo Encarnado se dedican a las actividades educativas y socio sanitarias.La congregación de Galveston cuenta con unas 171 religiosas distribuidas en 29 conventos[1]​ en Estados Unidos, El Salvador, Guatemala, Irlanda y Kenia.[4]​ La congregación de San Antonio por su parte, cuenta con unas 379 religiosas repartidas en 127 conventos[1]​ en Estados Unidos, México, Guatemala, Perú, Irlanda y Zambia.