Anexo:Armorial municipal de la provincia de Lérida

[2]​ y mediante el cual, la Generalidad de Cataluña era la institución que regulaba y registraba los símbolos, tales como la bandera o el escudo, de las entidades locales.[1]​ Este decreto, mediante su título segundo disponen la capacidad de los entes locales a adoptar un escudo, una bandera y un emblema como símbolos locales y que estos se deben inscribir sus símbolos en el Registro de entidades locales de Cataluña.La Generalidad de Cataluña, a partir del decreto, comprueba que las normas heráldicas sean respetadas, así como otros datos en los que se fundamentan los símbolos.También regula el procedimiento aplicable para la adopción, la modificación, el cambio o la rehabilitación de los símbolos.Entre otros puntos cabe destacar las siguientes regulaciones: El escudo, al igual que el resto de símbolos, se podrán utilizar a partir de su oficialización según el artículo 23.Ningún ente local puede hacer uso de un escudo que no sea el propio.Los cuatro palos del escudo de Cataluña recuerdan que la villa fue conquistada a los árabes por Ramón Berenguer III.El agnus Dei tumbado simboliza san Juan Bautista, el patrón del pueblo.El mundo (orbe) es el señal tradicional del escudo del pueblo y es el atributo de San Salvador, patrón de la localidad.[14]​ La carrasca es el señal parlante tradicional, alusivo al nombre de la villa.[16]​ «Partido: Primero de oro, y segundo de sinople; brochante sobre la partición dos llaves pasadas en sotuer con los dientes arriba y mirando hacia fuera, uno del otro.En 1970 se agregó Santa Linya, simbolizado por la cruz de la segunda partición.[42]​ Las palmas hacen alusión al martirio de los santos Esteban y Sebastián.La corona real es un señal tradicional del escudo del pueblo; en realidad, los reyes Jaime I, Jaime II, Pedro III y otros fueron comprando y vendiendo el dominio sobre la población, que siempre acababa retornando a los vizcondes de Cardona, barones de Anglesola y de Bellpuig.Más tarde, en 1400, la baronía pasó al vizconde Hug II de Cardona (en la segonda partición vemos las armas parlantes de esta familia).El escusón contiene propiamente el señal municipal, y también es parlante: contiene un cerro embellecido con la flor de lis (en catalán cerro se dice puig).[51]​ Hasta 2018 no tenía inscrito el escudo en el Registro de las Entidades Locales de Cataluña y usaba este blasón no oficial (derecha).Por timbre una corona mural de pueblo.»[61]​ El castillo de Castellserá, del siglo XII, y la sierra son señales parlantes que aluden al nombre del pueblo.En catalán castillo se dice castell y sierra es serra.La corona recuerda que Ciutadilla se convirtió en un marquesado en 1702.El pequeño olmo de encima es también un señal parlante relativo al nombre de la localidad (en catalán, olmo se dice om y omells es un diminutivo).[150]​ Las dos llaves adosadas son las armas tradicionales del pueblo, y son el atributo de san Pedro, patrón de la localidad.También hace referencia al condado de Pallars la corona con la que va timbrado el escudo.El águila bicéfala, probablemente, es un privilegio concedido al municipio por el conde rey y emperador Carlos I.[197]​ El escudo, de nueva creación, sustituye al que hasta el momento utilizaba el ayuntamiento, un híbrido entre torre, castillo y palacio sin ningún tipo de configuración heráldica.[204]​ Vilamós era la capital del tercio aranés de Lairissa, y las armas de la villa llevan los colores alusivos al Valle de Arán: argén por el agua de la Garona y los estaques de Vilamós (Estanh Long y Estanh Redon), y también por la nieve, que cubren las montañas una buena parte del año; el sinople está por los bosques, los prados y los campos.[217]​ El castillo de Gerb representado en el escudo fue construido por el conde Ermengol IV de Urgel en 1082, y durante unos cuantos años ostentó la capitalidad del condado.[220]​ Armas parlantes alusivas al nombre de la localidad (en catalán, pino se dice pi).El pino es una señal tradicional y propio de esta población como mínimo desde 1918.[221]​[222]​ El yugo y los bueyes son elementos tradicionales de las armas parlantes de Rocallaura, que hacen referencia al nombre del pueblo (específicamente al hecho de labrar, que en catalán se dice llaurar), igual como el roque (en catalán llamado roc), añadido más recientemente debido a la oficialización del escudo.
Escudo de la provincia de Lérida.
Señal de la Generalidad de Cataluña.