Henry Travers

Henry Travers fue un actor inglés conocido, entre otros papeles, por el de ángel en ¡Qué bello es vivir!

La familia estuvo en Prudhoe tan sólo un par de años, trasladándose posteriormente a Woodburn (Corsenside) en 1872 y después a Berwick-upon-Tweed en 1876.

El papel más conocido de Travers sería el del ángel Clarence que viene a salvar a James Stewart del suicidio en el film de Frank Capra ¡Qué bello es vivir!.

También tuvo una nominación a los Óscar como mejor actor secundario por su participación en La señora Miniver.

En 1965, Travers moriría y sería enterrado en Forest Lawn Memorial Park Cemetery de Glendale (California).