Henrietta Lacks

Sus padres fueron Eliza (1886-1924) y John Randall Pleasant (1881-1969), que trabajaban como guardafrenos en el ferrocarril.

El matrimonio Lacks tuvo cinco hijos: Lawrence (n. 1935), Elsie (n. 1939), David “Sony” Jr.

Elsie, que era descrita por la familia como "diferente" y "sordomuda", murió en el Hospital Estatal de Crownsville en 1955.

Muchos años después, la familia se enteraría de que allí Elsie sufrió abusos y pudieron haberle perforado hoyos en la cabeza para realizar experimentos.

Ese día le fue diagnosticado cáncer cervical y la apariencia del tumor era diferente a cualquiera antes visto por el ginecólogo examinador, Dr. Howard Jones; este fundaría con su esposa Georgeanna el Jones Institute for Reproductive Medicine en la Escuela de Medicina de Virginia del Este en Norfolk, Virginia.

En su segunda visita ocho días más tarde, el Dr. George Otto Gey tomó otra muestra del tumor y guardó una parte.

Lacks fue tratada con radioterapia durante varios días, un tratamiento común para estos tipos de cánceres en 1951.

[3]​ Con un fuerte dolor y sin mejoría, Lacks regresó al Hospital Hopkins demandando ser admitida el 8 de agosto, permaneciendo allí hasta su muerte.

[3]​ Una autopsia parcial posterior mostró que el cáncer había sufrido metástasis a otras partes del cuerpo.

Hacia 1954, las células HeLa estaban siendo usadas por Jonas Salk para desarrollar una vacuna contra la poliomielitis.

Las células HeLa han sido empleadas para investigar la sensibilidad humana a cinta adhesiva, pegamento, cosméticos y muchos otros productos.

Al marido de Henrietta, David Lacks, le informaron muy poco sobre los estudios a los que ella había sido sometida.

[4]​ La historia de Henrietta Lacks muestra los cuestionamientos legales y éticos a los que se enfrenta la investigación en biomedicina.