Cuando tenía catorce o quince años, un personaje divino se le apareció en un sueño y le ordenó que comiera polvo de mica para que su cuerpo se volviera etéreo e inmune a la muerte.
Subía y bajaba por los valles mientras revoloteaba como si fuera una criatura con alas.
La emperatriz Wu envió un mensajero para que fuera al palacio pero en el camino desapareció.
Ascendió a lo alto en plena luz del día y se transformó en inmortal.
Su símbolo es la flor de loto, que mejora la salud física y mental.