En la segunda década del siglo XXI, respondió que ya no era una activista, mas fuertemente, todavía se considera feminista.
Mientras tanto, ella tiene una postura crítica ante el desarrollo del movimiento feminista en días anteriores, que intenta atrapar en sus películas con frecuencia.
Junto a este festival, organizó otras iniciativas como Arab Shorts para el alemán Goethe-Institut.
Esa pregunta fue un tema importante en su documental "Lettre à ma soeur" ("Carta a mi hermana") que emitió un año; y, más tarde, al igual que sus otras producciones, también se emitió fuera de Argelia.
En Lettre à ma soeur intenta refutar de que la violencia sea una solución a las disputas sociales.