HMS Royal Oak (08)

El barco atrajo la atención mundial cuando en 1928 sus oficiales de alto rango fueron sometidos a una corte marcial en un proceso muy controvertido.

Para los británicos, el ataque al Royal Oak demostró que los alemanes eran capaces de llevar la guerra naval a sus propias aguas, y la impresión causada tuvo como efecto inmediato el refuerzo de la seguridad portuaria.

El buceo entre los restos del pecio está totalmente prohibido a submarinistas no autorizados.

[2]​ El carbón de alta calidad, por otra parte, se encontraba en abundancia, y los suministros domésticos estarían garantizados.

[20]​ La atención pública alcanzó tal cota que el mismo rey Jorge V convocó al Primer Lord del Almirantazgo, William Bridgeman, para exigir una explicación.

El mismo Collard fue criticado por la prensa y por el Parlamento del Reino Unido por los excesos de su conducta, y al ser denunciado por Bridgeman como un «inepto para ostentar alto mando»,[22]​ fue retirado por la fuerza del servicio.

[26]​ Collard se retiró a la vida privada y nunca habló del incidente públicamente.

[32]​ En esta ocasión, sin embargo, los británicos optaron por no protestar al considerar el incidente un acto fortuito.

[35]​ En esta misma época el Royal Oak apareció, junto con otros catorce navíos de la Marina Real, en una producción cinematográfica.

[37]​ En 1938 el Royal Oak regresó a la Home Fleet y fue nombrado buque insignia del Segundo Escuadrón de Acorazados, con base en Portsmouth.

[38]​ En octubre el Royal Oak se unió a la búsqueda del acorazado alemán Gneisenau, que había sido enviado al mar del Norte para actuar de distracción para los británicos mientras los acorazados de bolsillo Deutschland y Admiral Graf Spee atacaban buques mercantes aliados.

[41]​[42]​ La misión había evidenciado la obsolescencia del viejo acorazado, que ya sumaba veinticinco años.

[52]​ Inicialmente Prien confundió el más sureño estrecho Skerry como la ruta correcta, y la súbita comprensión de que el U 47 se dirigía a un paso bajo bloqueado le obligó a virar con rapidez al noreste.

[Nota 4]​[55]​ A las 00:27 del 14 de octubre, Prien había conseguido infiltrarse en el puerto correcto y anotó un triunfal Wir sind in Scapa Flow!!!

Prien lo confundió con un crucero de batalla clase Renown, y luego la inteligencia alemana lo etiquetó como HMS Repulse.

[58]​ Recibió pocos daños visibles, aunque el ancla de estribor se rompió y repiqueteó ruidosamente.

[Nota 6]​ Muchos marineros volvieron a sus hamacas, inconscientes de que el acorazado estaba siendo atacado.

[58]​[59]​ Prien hizo dar la vuelta al submarino y disparó un cuarto torpedo con el tubo lanzatorpedos de popa, pero también se perdió.

[62]​ El almacén comenzó a arder y una bola de fuego se expandió rápidamente por todos los espacios internos del buque.

Además, una gruesa capa de combustible del barco cubrió la superficie del agua, llenando los pulmones y estómagos de los marineros caídos al mar y dificultando sobremanera sus esfuerzos para mantenerse a flote.

[67]​ Gatt encendió las luces del Daisy 2 y se lanzó al rescate de los supervivientes.

Él y sus hombres consiguieron rescatar 386 marineros del Royal Oak, incluyendo su capitán William Benn.

[71]​ Los británicos no tuvieron claro en un principio las causas del desastre, suponiendo que el hundimiento se debía desde una explosión a bordo hasta un ataque aéreo.

El día 17 el Primer Lord del Almirantazgo Winston Churchill anunció oficialmente la pérdida del Royal Oak a la Cámara de los Comunes del Reino Unido, reconociendo en primer lugar que tal acción había sido «una extraordinaria hazaña de capacidad profesional y audacia», pero declarando después que tal pérdida no afectaría materialmente al balance de poder naval.

Años después circuló el rumor de que Prien había sido guiado hasta el fondeadero de Scapa por un tal Alfred Wehring, un agente alemán que vivía en las Orcadas haciéndose pasar por un relojero suizo llamado Albert Oertel.

[99]​ En condiciones de agua clara, el casco puede verse a solo cinco metros bajo la superficie, aunque las letras que identificaban el nombre del acorazado fueron sustraídas por un submarinista que las quería como recuerdo en los años 70 del siglo XX.

Las identidades de todos los fallecidos no fueron hechas públicas por el gobierno hasta cuarenta años después del desastre.

Una campana del acorazado fue recuperada en los años 70, y tras ser restaurada, se añadió al memorial en la catedral.

[101]​ Algunos cadáveres, que no pudieron ser identificados, fueron enterrados en el cementerio naval de Lyness.

[107]​ Los sonogramas de alta resolución mostraron al Royal Oak volteado, con su cubierta contra el lecho marino.

El Royal Oak visto por proa.
El Royal Oak tras la remodelación de 1924.
Cañón de artillería antiaérea del Royal Oak .
El capitán Kenneth Dewar, sometido a corte marcial en 1928.
El Royal Oak durante unas maniobras en 1928.
El Royal Oak durante el traslado del cuerpo de la reina Maud, motivo por el que enarbola a media asta la bandera de Noruega.
Mapa de Scapa Flow.
Mapa que detalla la infiltración del U 47 en Scapa Flow.
Günther Prien , comandante del U 47 , en 1940.
Lugar por el que Prien entró en Scapa Flow, hoy cerrado por la barrera que ordenó construir Churchill.
Familiares leyendo la lista de supervivientes del Royal Oak .
Lápidas de algunos de los más de ochocientos marineros muertos en el hundimiento del Royal Oak . Isla de Hoy , Orcadas .
Resto de combustible sobre el lugar en que está hundido el Royal Oak .