HIJOS (acrónimo recursivo para Hijos e Hijas por la Identidad y la Justicia contra el Olvido y el Silencio) es una organización de derechos humanos de Argentina, con filiales en distintos puntos de ese país conformada principalmente por hijos e hijas de desaparecidos durante la última dictadura militar de ese país que fue fundada el 3 de noviembre de 1995.
La película plantea que todo hijo de desaparecidos tiene una identidad partida en dos que intenta recomponer y, por otra parte, puede apoyar las acciones que permitan hacer justicia, traer de nuevo a la memoria, denunciar la pervivencia en el presente de los crímenes del pasado.
Lucila es la hija de Roberto Quieto, que fuera líder máximo de las FAR primero e integrante de la conducción de Montoneros después, que desapareciera durante el gobierno de María Estela Martínez de Perón; Lucila trabaja con una técnica de sobreimpresiones que les permite incluirse, a ella y a sus pares, en la misma imagen en la que están sus padres.
Vero nació mientras su madre estaba en cautiverio y aguarda reencontrarse con su hermano (al que presume apropiado) y lustra la vajilla de la abuela como si allí se atesorara la memoria familiar.
Silvina ha recuperado los restos de su padre desaparecido y entrevista a las otras dos con la intención de escribir un ensayo sobre el perdón y la justicia.