[1] Hacia finales del XVIII, la base documental de los Archivos Departamentales, que entonces no estaba unificado en un solo lugar, comenzó a crecer considerablemente.
Pierre-Auguste Labbé (1823 - 1881)[2] conocido por su trabajo en la capilla del Grand séminaire y el hôtel des Sourdes-Muettes de la rue Castéja, es el arquitecto departamental durante este periodo.
Las ventanas del tercer nivel son muy sencillas, imitando así las fachadas de estilo clásico.
Pero finalmente, el arquitecto respondió a esta inquietud perforando el edificio con grandes ventanales para ventilar las habitaciones.
El cuerpo central del edificio comprende en la planta baja un gran vestíbulo con el alojamiento para el conserje, una biblioteca así como una sala para el archivo y recepción de nuevos papeles.
La escalera principal conducía a una gran sala de lectura donde el público podía consultar los documentos y el despacho del archivero.
Además, los materiales de construcción se eligieron especialmente evitando que fueran combustibles: piedra, ladrillo, hierro y fundición.
Además, se crearon nuevos espacios, entre ellos una sala preparada para albergar un taller de microfilmación.