Es considerad el mejor bateador mexicano de todos los tiempos y el jugador que conocía los lanzamientos que los pitchers rivales le enviarían antes de enfrentarse a ellos.
En 1960 estuvo con los Tuneros de San Luis Potosí en la Liga Central Mexicana.
En 63 juegos, bateo .362 con 20 jonrones en solo 229 veces al bate siendo líder en slugging con .729.
Un año más tarde solo jugó 17 encuentros con los Tuneros, bateando .465 conectando 8 cuadrangulares con 33 imparables y produciendo 30 carreras y al no llegar a un acuerdo con Anuar Canavati para participar en la Liga Mexicana de Verano fue suspendido.
Espino procedió a batear .300 con tres jonrones en 32 juegos, pero nunca había jugado fuera de la Liga Mexicana.
Louis Cardinals, en donde recibió 30 mil dólares sin darle participación a Espino y originó que Espino no reportará el equipo de Jacksonville en 1965 por lo cual Anuar Canavati tuvo que devolver el dinero.
Esa es la realidad por lo cual Héctor Espino nunca jugó en las Ligas Mayores.
Finalizó segundo en la liga con 31 jonrones y tercero en bases por bolas con 91 después de perder dos series en gira por conflicto con su mánager el cubano Wilfredo Calviño.
El Total Baseball mencionó que Espino era como un gran pez en una pequeña pecera.
También anotó 101 carreras y produjo también 101, con el mayor número de bases por bolas en la liga con 94.
Produjo 107 carreras siendo líder y bateo 22 jonrones, quince menos que en su temporada previa.
Jugó en seis Series del Caribe, siendo nombrado el Jugador Más Valioso en las ediciones de 1974 y 1976.
Héctor Espino participó en la Serie del Caribe en 1976, formando parte del equipo "Naranjeros de Hermosillo" siendo dirigido por el legendario mánager Benjamín "Cananea" Reyes, en donde este equipo, fue campeón por primera vez en la historia, obteniendo el gallardete para México, en la Serie del Caribe realizada en Santo Domingo, República Dominicana.
Héctor Espino fue nombrado el MVP (Jugador Más Valioso) además de ser parte del equipo ideal de la Serie del Caribe en ese año.
Carin Arévalo era originario del municipio de Carichi, Chihuahua.
Posteriormente, la capacidad del estadio se aumentó a 14,000 localidades.