Ese mismo año participó en la obra No hay piedad para Hamlet.
Se estableció en Lima, Perú hasta 1992, año en que regresó a Buenos Aires, Argentina.
En 2007, regresó a Perú donde retomó su carrera en teatro y televisión.
Luego tuvo como pareja a la actriz Cecilia Tosso.
Sus restos velados en la Sala Paracas del Museo Nacional.