Después de haber llegado a Sudamérica, en 1940, los tres hermanos Deutsch -y sus socios, los Steuer- fundaron Tía SA, y el joven Gustavo fue entrenado para el negocio.
Eran sólo dos aviones Shorts SD3-30 de treinta plazas que hacían la ruta a Colonia (Uruguay).
[cita requerida] Hasta el momento del accidente, Deutsch contestaba los llamados telefónicos que se le hacían y firmaba los cheques por los sueldos de sus 1200 empleados.
Anillaco es sinónimo de Menem, y gracias a su gobierno hemos tenido tantas oportunidades".
[cita requerida] las compañías criticaban el impuesto docente, la voz de Deutsch fue fuerte: "Ese gravamen nos va a convertir en el basurero del mundo, atrayendo aviones que son más baratos pero se han prohibido en otras partes porque no cumplen las normas de seguridad".
La ruptura de lanzas fue cuando otra empresa, Dinar, se anticipó y pidió cubrir la nueva ruta a Malvinas.
En el momento del accidente, Deutsch y su mujer, Graciela, cenaban en la casa de unos amigos.
Después fue a Aeroparque y se atrincheró en su oficina, a menos de 300 metros del infierno en que se había convertido su avión, para seguir manejando personalmente su empresa, aun en el momento más crítico.