Guillermo II Crispo
De este modo esperaba evitar ser a su vez si no conquistado al menos preocupado.[4] Hacia el final de su vida, el duque estaba cada vez más enfermo y débil.[cita requerida] Dejó un hijo ilegítimo que, por tanto, no pudo heredar.Le había concedido un feudo en Naxos, cerca del pueblo de Filoti.Le debía por esta plaza fuerte que incluía prados, huertos y pozos, el pago de una manzana en Navidad.La ley sálica y la diplomacia veneciana pasaron el ducado a un sobrino suyo, el hijo del ex regente Nicolás, Francisco II Crispo.