Aunque el término ‘guerra’ sugiere una competencia intensa, la realidad es que la rivalidad entre estos navegadores ha disminuido en comparación con el pasado.
[1] Hacia mediados de 1995 la World Wide Web comenzaba a ganar notoriedad pública.
Internet Explorer 2.0 fue lanzado tres meses más tarde; la carrera por el control de la navegación web había comenzado.
Esto también trajo un fin a las rápidas innovaciones en navegadores; no hubo nuevas versiones desde el Internet Explorer 6.0, que se lanzó para coincidir con el lanzamiento de Windows XP (2001) hasta el 2006 cuando fue lanzado el Internet Explorer 7.0. que es un navegador muy superior en funcionalidad a su versión anterior.
Éste fue un cambio obligado pues Firefox, de la Fundación Mozilla, lo superaba en compatibilidad con estándares web, funcionalidad y el soporte a extensiones convirtiéndolo en un nuevo competidor serio que amenazaría su posición en el mercado.
Muchos desarrolladores web también crearon sus páginas para trabajar únicamente con las idiosincrasias de Internet Explorer en vez de apegarse a los estándares, lo cual significó que muchas páginas web solo podían ser vistas correctamente en Internet Explorer.
En adición, Microsoft implementó varias extensiones propietarias a las tecnologías web, provocando una incompatibilidad absoluta con otras plataformas (ejemplo de esto son las extensiones VBScript y ActiveX, tales como las técnicas DHTML propias de Microsoft).
Varios productos derivados han sido creados, incluyendo el mismo navegador liviano de Mozilla llamado Firefox.
Vista incluirá nuevas herramientas tales como Ávalon y XAML (un lenguaje XML propietario), lo cual permitirá a los desarrolladores construir aplicaciones web extensivas, las cuales pueden ser comparadas a grandes rasgos con los conceptos de XUL de Mozilla.
Como respuesta a esto, en abril de 2004 la Fundación Mozilla y Opera Software unieron esfuerzos para desarrollar nuevos estándares en tecnología los cuales añaden mejores capacidades a la vez que mantienen compatibilidad con tecnologías ya existentes.
La batalla de los navegadores se libra actualmente entre los seis principales navegadores: Internet Explorer, Microsoft Edge, Mozilla Firefox, Chrome, Safari y Opera, pero especialmente entre Microsoft Edge, Mozilla Firefox y Google Chrome, que son los más usados actualmente.