[2] Bajo el mando del General Jan Verveer, la fuerza partió desde Elmina hacia Ahanta en 1838.
[1] Badu Bonsu fue procesado en una corte marcial ad hoc en campo abierto, en donde fue sentenciado a muerte.
[1][2] No obstante, fue colgado al día siguiente en el mismo lugar en el que los dos enviados de Tonneboeijer habían sido disparados.
[1] Sin embargo, es más probable que está acción haya sido tomada como represalia, ya que los enviados neerlandeses también habían sido decapitados por Badu Bonsu y sus cabezas después fueron clavadas en su trono como ornamentos.
[4] Basándose provisiones establecidas en el Tratado de Butre, el tratado de 1656 que regía las relaciones entre los Países Bajos y el pueblo ahanta, los neerlandeses reorganizaron el estado Ahanta luego de la rebelión, nombrando al residente neerlandés en el Fuerte Batenstein como regente, y manteniendo al país bajo un cercano control con mayor presencia militar y civil.