A través del siglo XVI ya se manejaba un término común, «mal francés».
A esta enfermedad, Fracastoro la llamó «sífilis», pero este nombre no se hizo común hasta el inicio del siglo XIX.
[3] Fracastoro publicó en el año 1530, Syphilis sive morbus Gallicus, obra dedicada al cardenal Pietro Bembo, un conocido erudito, además de secretario papal.
En el primero, Fracastoro describe los inicios de la enfermedad y la confusión que causó.
El poema fue traducido a varias lenguas y publicado en más de cien ediciones.
Su teoría ofrece tres posibilidades interrelacionadas para explicar la naturaleza del contagio de enfermedades en general.