Tras estudiar en Atenas, París y Londres, su primer ensayo fue Espíritu libre (1929).
a este ensayo le siguieron tres novelas antes de decalrarse la Segunda Guerra Mundial: Argo (1936), El Demonio (1938), y Leonís (1940).
Su primera y más influyente novela, Argo, versa sobre los problemas de la gente joven que crece en tiempos difíciles y turbulentos.
Tras la guerra se relacionó más con el teatro, y en dos ocasiones ocupó el cargo de director del Teatro Nacional de Grecia.
Es recordado por su amistad y correspondencia con grandes figuras de la generación de los 30, incluyendo al premio Nobel George Seferis.