Su padre le enseñó a tocar el violín, lo cual sería el comienzo de una familia dedicada a la música.
Georg Hellmesberger tuvo dos hijos y dos nietos músicos.
Consiguió entrar a estudiar en el Conservatorio de Viena, bajo las enseñanzas de Josef Böhm, y Emanuel Förster.
En 1821 se convirtió en el asistente de Böhm.
Posteriormente, dio clases en el Conservatorio, convirtiéndose en profesor del mismo entre los años 1833 y 1867.