Gentilhombre de boca

Se encontraba a las órdenes del Mayordomo Mayor.

Hacia 1619 se consideraba la pobreza de esta clase palatina como extrema hasta el punto de señalar que no podrían acompañar a Felipe III a su viaje a Portugal por su precariedad económica.

[3]​ Sus funciones variaron a lo largo de la existencia del cargo.

El cargo era inmediatamente inferior en rango al de mayordomo de semana y dependía como este del mayordomo mayor del rey.

Su número varió a lo largo de su existencia, aunque solían estar divididos en tres clases para poder ejercer en turnos de copero, panetier y trinchante en la mesa del rey.

Bordado del uniforme de los gentileshombres de boca en la Guía palaciana (1901).
Vista de la Saleta del Palacio Real de Madrid hasta donde tenían entrada los gentileshombres de boca, por Cecilio Pizarro