Gaspër Thaçi

En 1930 regresó a Shkodër, donde se convirtió en párroco de la parroquia local, ayudando al arzobispo Lazer Mjedja en su trabajo, ya que estaba enfermo.También ocupó este cargo durante la invasión italiana de Albania, manteniendo conversaciones con las autoridades italianas, que luego sirvieron de pretexto a las autoridades comunistas para acusar a Thaçi de colaboración con los italianos.[7]​ Dos frescos conmemorativos a los mártires cristianos falsamente acusados fueron pintados por un autor local con el título de Gran difamación (Shpifja e Madhe) en la iglesia de san Francisco de Gjuhadol en Shkodër, donde se describe algunos aspectos que muestra a los frailes encadenados cargando fusiles previamente escondidos por las autoridades, en el altar de San Antonio para acusarlos y detenerlos.Los ahora beatos, los comunistas, abrazados por los demonios, perpetran la detención.Satanás colabora con los comunistas; el pueblo fiel asiste aterrado ante el suceso, sabedores de la persecución que se les avecina.