Gracias a esta decisión Gallarate obtuvo grandes beneficios, al transforse en un rico centro comercial.
Se convierte así en un feudo, que pasa continuamente en manos de distintas familias (Bentivoglio, Caracciolo, Pallavicino, Altemps, Visconti y Castelbarco).
Todos estos cambios sin embargo no alterarán su liderazgo en el comercio del Alto Milanesado.
De hecho, en Gallarate, vivían Giuseppe y Pompeo Castelli, titulares de esa "farmacia del renacimiento" en la que, según la tradición, Gerolamo Rovetta ambientó su novela "Romanticismo".
Quizás por esto Gallarate se está volcando más hacia el comercio.