Posteriormente, anuncia un castigo de Yavé al rey por haber mandado el censo del pueblo.David confiesa su pecado y Gad le ofrece elegir entre tres formas de castigo: siete años de hambre, tres meses de derrotas o tres días de peste.Tras el castigo, el profeta permite al rey construir un altar a Yavé, símbolo de su reconciliación y se apartó la peste de Israel (2 Sam 24, 11-25).Es descrito, junto al también perdido Libro de Natán el profeta, en 1 Crónicas 29,29.Es posible que estos tres textos se unieran para formar los dos libros de Samuel que se conservan.