Tras publicar algunos sencillos, con temas como la «Tocata y fuga de Bach», su segundo álbum, Fusioon 2, llegó en 1974.
Contenía canciones poco comerciales, pero que lograron una importante difusión.
Incluía algunos temas compuestos por los hermanos Camp, como «Concerto Grosso»,[1] «Diálogos» y «Farsa del buen vivir».
Su último trabajo discográfico y, a su vez, el más ambicioso, Minorisa[2] (1975), era un LP doble que ofrecía un programa musical que constaba de tres suites: «Ebusus»,[3] «Minorisa» y «Llaves del subconsciente».
Tras la disolución del grupo, sus miembros continuaron ligados a la música: Martí Brunet se especializó en la música electrónica; Santi Arisa fundó Pegasus, importante grupo catalán de jazz-fusión, y Manel Camp continuó con una dilatada carrera como acompañante de figuras de la Nova Cançó, como solista y como director de pequeños conjuntos de jazz y Jordi Camp bajista, siguió su carrera musical.