[2] En Chile, donde se la conoce como tagua cornuda,[3] anida en las lagunas Miscanti y Meñiques, donde su número de ejemplares fluctúa notablemente durante el año debido al desplazamiento de las aves desde y hacia las lagunas ubicadas en Argentina y Bolivia; en otoño, alcanza su punto más alto.
Para dar una mayor protección a esta especie, se han introducido medidas especiales para la visita durante la temporada reproductiva, que se extiende allí de julio a diciembre.
[1] La focha cornuda es monógama y algunas veces se reproduce en colonias de hasta 80 pares.
Estas aves amontonan piedras para formar una isla artificial que llega a la superficie del agua.
Se ha estimado que los montículos de piedra puede llegar a pesar hasta 1,5 toneladas y son renovados en cada temporada.