Frontera entre Croacia y Hungría

Se extiende en dirección oeste-este a lo largo de 348 kilómetros desde el trifinio Hungría-Croacia-Serbia (en Voivodina) hasta el trifinio entre ambos estados y Eslovenia.

Está parcialmente marcada por el río Drava y separa los condados croatas de Virovitica-Podravina, Koprivnica-Križevci, Vukovar-Srijem y Osijek-Baranja de los condados húngaros de Vas, Zala, Somogy y Baranya.

[1]​ Esta frontera quedó establecida a finales de la Primera Guerra Mundial (1918) cuando se disolvió el Imperio austrohúngaro y Croacia, hasta entonces parte de Hungría, entró a formar parte del Reino de los Serbios, Croatas y Eslovenos, después Reino de Yugoslavia según los tratados de Saint-Germain (1919) y Trianón (1920).

La frontera no cambió hasta 1941 cuando se formó el Estado Independiente de Croacia bajo tutela del Tercer Reich, puesto que el condado de Međimurje y la Baranja croata fueron transferidas a Hungría.

Finalmente, el 1 de julio de 2013, Croacia se adhirió a la Unión Europea, de forma que la frontera croato-húngara era una frontera interna de la Unión Europea; sin embargo, siguió siendo una frontera exterior del área de Schengen puesto que Croacia aún no formaba parte.

Puente sobre el río Drava en Zákány.