No existe ningún remedio eficaz para evitar el frisado, aunque se puede disminuir o retrasar con una esmerada protección al roce intensivo.
Por ejemplo, en el caso de las prendas de vestir es importante evitar el roce con los complementos (collares, pulseras, bolsos, etc), piezas que suelen ser móviles y generan una fricción constante con las otras prendas.
El frisado, también conocido en algunos países como moteo, se produce por el roce de las fibras que componen los tejidos.
Existen en el mercado diversos instrumentos, manuales o eléctricos para la eliminación de las bolitas y pelusa pero con funcionalidad limitada.
Para el mejor cuidado de los tejidos naturales y su conservación algunas recomendaciones básicas son: