En 1934 se trasladó a Salzburgo, donde fue nombrado director de bandas militares.
Tuvo diversos alumnos, a los cuales dio una excelente formación musical europea, entre ellos Benigno Mejía y Rafael Juárez Castellanos.
Fue quien descubrió y estrenó para el siglo XX la Sinfonía Cívica de José Eulalio Samayoa, así como las Variaciones para violín y orquesta de José Escolástico Andrino.
La obra de Franz Ippisch se encuentra en Viena, donde fue depositada por su hijo en 1963.
Según el compositor austriaco Gerald Schwertberger, estudioso de Franz Ippisch, un catálogo preliminar sería como sigue: