Francisco Romo y Gamboa

Su padre le enseñó las primeras letras en el hogar familiar y académico, pasando después a las Escuelas Pías, donde continuó su formación.

Aunque los dos hermanos mayores fueron parlamentarios y tuvieron una notable carrera política, el más conocido de todos los hermanos fue Judas José Romo y Gamboa.

La familia Gamboa pertenecía al estamento nobiliario desde el siglo XV.

Al quebrar el Antiguo Régimen, a raíz de la Guerra de la Independencia, supieron transformar los viejos privilegios nobiliarios en una sólida posición política y económica.

Además, como toda la élite liberal de Guadalajara, los Romo y los Gamboa emprendieron una práctica matrimonial muy endogámica.

Los Romo, por su parte, emparentaron primero con los Bedoya, luego con los Torres, a causa del enlace de Inés Romo Bedoya con José Torres y Tovar, y finalmente con los Udaeta por casarse aquella en segundas nupcias con José Domingo de Udaeta Ferro.

Francisco Romo y Gamboa Fernández contrajo matrimonio en dos ocasiones; la primera vez se casó con Juana Lagúnez, que falleció al poco tiempo sin dejar descendencia, y en segundas nupcias lo hizo con Teresa Balanzat, que también era viuda y que tenía cuatro hijos de su anterior matrimonio.

Tuvieron dos hijas: María del Carmen, que permaneció soltera, y María de Sopetrán, que se casó con el teniente coronel Mariano Bardají, comandante del Cuerpo de Estado Mayor.

Durante su estancia en Teruel como primera autoridad provincial salvó la vida a Tadeo Calomarde, natural de esa provincia, interponiéndose personalmente en medio de un tumulto para evitar que fuese atropellado por los liberales.

Finalmente, la Reina Gobernadora nombró como Gobernador Civil de Zaragoza a Joaquín Alcorisa y Francisco Romo Gamboa quedó en situación de cesante.

En el Real Decreto, la Reina Gobernadora María Cristina de Borbón menciona expresamente su satisfacción por el celo y lealtad de Francisco Romo y Gamboa, y exhorta al gobierno a que le ofrezca otro nombramiento en cuanto se haya restablecido su salud.

No parece posible que los dos Jefes Políticos de la provincia madrileña cesasen por idéntico motivo en tan breve plazo.

También intervino con frecuencia en asuntos económicos, como tributos, exenciones o reparaciones de guerra tras la derrota del Carlismo.

Disueltas las cámaras en 1843, volvió a abrirse el Senado después de que finalizase la Regencia del general Baldomero Espartero.

Cinco días después se informó de su fallecimiento a ambas cámaras y su escaño en el Congreso fue ocupado por Luis María Pastor Copo.