Su taller estaba situado en la calle Ancha sobre el local de la sociedad Lo Niu guerrer, siendo un estudio de pequeñas dimensiones iluminado por una única claraboya.
Amigo de los pintores Cayo Zunzarren y Remigio Cid Armengol así como del escultor Enric Clarasó, fue también el padre del pintor Francisco Galofré Suris.
Principalmente pintó grandes composiciones sobre temas históricos y religiosos como La glorificación de la Virgen, integrada por varias grandes telas, para el camarín del Santuario de la Bonanova; Jesús en el templo, Alfonso XIII en Montserrat, La bandera de El Bruch y La Paz universal.
Su obra más importante y conocida es Boria abajo, una representación de un castigo por azotes en el siglo XVII, que se encuentra expuesta en el Museo de Valls.
Durante muchos años ejerció de crítico artístico en el periódico barcelonés Las Noticias.