Tenía, según indicaba la relación, 29 años en el momento de recibir el premio.
[1][2] Concurrió de nuevo a los premios del año 1755 otorgados en enero de 1756.
En esta ocasión no se admitían óleos, sino dibujos a lápiz o a la aguada.
Díaz recibió el segundo premio, por detrás de José del Castillo.
Tanto estos dibujos como su cuadro del rapto de Deyanira se conservan en el museo de la Real Academia.