Tuvo una formación artística muy ligada al manierismo, pues su maestro fue Giovanni Battista Naldini.
Sus primeras obras como artista independiente revelan la influencia de pintores como Santi di Tito o Jacopo Ligozzi.
Más tarde su estilo se acercará al de Lodovico Cigoli y Domenico Passignano.
Continuará avanzando en este estilo, aunque en los últimos años de su carrera ya no habrá innovaciones importantes, tal vez una mayor austeridad en los colores y una simplificación del dibujo, siempre preciso.
Los nuevos artistas del pleno barroco (cuyo principal exponente será Pietro da Cortona) no hallarán eco en el estilo de Curradi.