Francesc Nel·lo

Nel·lo, que en Tarragona se había iniciado en la pintura bajo la maestría de Père Ferran, continuó sus estudios artísticos en la escuela de la Llotja, con el maestro José Mongrell y los profesores Montaner y Labarta.

En el campo del interiorismo, se formó junto a Jaume Llongueras, con quien más adelante colaboraría profesionalmente durante muchos años.

Esta faceta como dibujante y humorista se verá interrumpida definitivamente al inicio de la Guerra Civil, en 1936, cuando decidió abandonar la redacción de estos medios para entrar a formar parte del ejército republicano.

Nel·lo se incorporó el mismo año de su creación, cuando contaba apenas con veinticuatro años.

Publicó de manera regular hasta 1936, cuando estalló la Guerra Civil, momento en que abandonó Barcelona para combatir en el frente.

Francesc Nel·lo dibujó para el semanario de forma más o menos regular hasta 1936.

Igualmente, en 1932 Nel·lo empezó a dibujar para La Campana de Gràcia, junto con Gargallo y Passarell, dando por acabada su tarea en la revista en 1934.

En 1936 inició una corta colaboración con el semanario Papitu, incorporándose a la segunda hornada de dibujantes formada, entre otros, por Opisso, Joan Colom "Adam" o Melcior Niubó "Niv-Bueno", dando por acabada así su trayectoria en el mundo de la prensa gráfica política.

Resulta interesando contrastar este estilo con el que mantenía la prensa conservadora, más próxima a la línea clara de tipo cómica, como la del belga Hergé o la del americano Segar.

Como diario catalizador del pensamiento republicano de su época, La Humanidad exigía desde su dirección una proyección iconográfica eminentemente política.

instalaron un taller colectivo, donde los integrantes trabajaron para producir carteles, pancartas y otros elementos de propaganda gráfica.

También habilitaron un depósito ferroviario a Santo Andreu para pintar vagones de tren con eslóganes y propaganda revolucionaría.

Todos los integrantes del comité tenían que estar dispuestos a tomar armas e ir al frente cuando fuera necesario.

Nel·lo marchó hacia Alcañiz, a la Tierra Baja, punto estratégico de las comunicaciones entre Zaragoza, Reus y Tarragona.

Estuvo preso durante dieciocho meses, primero en la Modelo y después en un centro penitenciario en la calle Santa Elies.

El hecho que lo encarcelaran como oficial del ejército republicano fue positivo por él, puesto que si hubiera sido culpado por sus dibujos y por su actividad política la condena, seguramente, habría sido más dura.

Así pues, tendrá que continuar su producción creativa en varios sectores: Principalmente, Francesc Nel·lo se intruducirá en el mundo de la escenografía.

Durante los años del franquismo recuperó esta actividad e intervino en numerosas restauraciones: en la casa Naves de Argentona, donde trabajó junto con Josep Obiols; también participó en la segunda reforma del Palacete Albéniz, junto con Evarist Móra, y en otros muchos lugares, entre ellos la Casa Castellaranau de Tarregona, con César Martinell.

Las actitudes de la élite civil tarraconense durante la restauración (1890-1914): cohesión interna, dependencia externa.

La Humanidad , nº385. 21 de julio de 1935
La Humanidad , nº389. 7 de julio de 1935
Papitu , nº1445. 3 de diciembre de 1936
La Humanidad , nº392. 24 de agosto de 1935
La Humanidad , nº368. 14 de mayo de 1935
La Humanidad. nº373. 25 de mayo de 1935
La Humanidad , nº378. 23 de junio de 1935
La Humanidad , nº379. 25 de junio de 1935