Fractura proximal de fémur
[3] Los factores de riesgo incluyen osteoporosis, tomar muchos medicamentos, consumo de alcohol y cáncer metastásico.[2][1] El diagnóstico generalmente se realiza mediante radiografías.[1] Ocasionalmente, se pueden requerir imágenes por resonancia magnética, una tomografía computarizada o una gammagrafía ósea para llegar al diagnóstico.[1][3] El manejo del dolor puede requerir el uso de opioides o un bloqueo nervioso.[2] Las fracturas de cadera se vuelven más comunes con la edad.