32 fouettés fueron interpretados por primera vez por Pierina Legnani en Cenicienta de Marius Petipa en 1893.
Reportó que "...en el último acto Legnani se superó positivamente a sí misma.
Cuando Emma Bessone bailó el papel principal en El Tulipán de Haarlem, hizo 14 fouettés.
En su variación, Legnani realizó 32 de ellos sin parar, y sin viajar ni un centímetro!
[2] Legnani repitió esta hazaña en muchos otros ballets a lo largo de su carrera.