En 1919 obtendrá una plaza como profesor en la misma, llegando en 1937 a ser su director hasta el año de su jubilación.
En lo personal, Fortunato Julián rehuyó los compromisos públicos y los contactos con personas ajenas a su círculo de conocidos.
[2] Fortunato Julián destacó en diversos campos artísticos, pues abordó por igual la pintura, el dibujo y la ilustración, la escultura, la orfebrería o incluso la realización de pergaminos iluminados.
Fue solicitado igualmente para crear pergaminos miniados para homenajear a distintos personajes.
Así mismo creó la llamada "Sala Cidiana" en la sede de la Diputación Provincial de Burgos, una sala-homenaje al Cid para la que ideó completamente la decoración mural, el mobiliario e incluso las vidrieras.