Fortificaciones de Corumbá

El establecimiento portugués en este lugar se remonta a la transferencia del Presidio de Albuquerque (Albuquerque Velho, actual Ladário) para un lugar más adecuado, constituyendo el embrión de la futura villa (hoy ciudad) de Corumbá.

Como resultado, las fuerzas paraguayas evacuaron São Joaquim, Pirapitangas, Urucú y Albuquerque (nuevo), que en conjunto integraban el Distrito Militar del Alto Paraguay.

[2]​ De acuerdo con SOUZA (1885), finalizado el conflicto fueron planeadas nuevas fortificaciones para Corumbá por el mayor Joaquim da Gama Lobo d'Eça, compuestas por una línea continua con baluartes cubriendo a la villa, con capacidad para sesenta cañoneras, y por el Forte do Limoeiro, abajo de la villa, en la margen del río Paraguay, cruzando fuegos con el Fortim de São Francisco, el Fortim Junqueira, el Fortim Conde d'Eu, el Fortim Duque de Caxias, y el Fortim Major Gama, construidos durante las administraciones del coronel Cardoso y del brigadier Hermes.

Con relación a la defensa del núcleo urbano de Corumbá, esa Comisión deliberó executar un extenso plan constituido por una red de fortificaciones estratégicamente posicionadas desde la embocadura del canal do Tamengo hasta Ladário.

GARRIDO (1940) afirma que esas fortificaciones fueron concluidas en 1873 por el mayor Frota.,[3]​ y detalla: