David Freeman (Joey Cramer) es un niño de 12 años que vive en Fort Lauderdale, Florida (Estados Unidos).
En ese periodo de tiempo, David ha sido trasladado al hospital para investigar por qué no ha envejecido en estos ocho años.
Los médicos, al realizarle pruebas en su cerebro, descubren que este almacena una gran cantidad de cartas estelares muy precisas.
El científico jefe de la NASA, el doctor Faraday (Howard Hesseman), descubre la historia de David y acuerda que se le traslade a las mismas dependencias donde se encuentra la nave espacial.
Mientras Max intentaba abandonar la Tierra para volver a Phaelon, tuvo un accidente y se empotró con unas líneas de alta tensión, borrando de su memoria todas las cartas galácticas y demás datos para poder volver a su planeta.
David se fija en un Puckmaren, un pequeño ejemplar alienígena, el último de su especie, debido a que su planeta explotó.
Jeff utiliza varios cohetes pirotécnicos para que David los vea desde el cielo y pueda localizar la casa.
Esta producción fue originalmente concebida dentro del cine independiente por Producers Sales Organizations(PSO).
La compañía compró los derechos de la película por un precio muy bajo y después financió el resto del proyecto para que se pudiera completar.
Las CGI, sin embargo, no se usaron para diseñar los escalones de la nave suspendidos en el aire.
Estos escalones aparentan soportar el peso de David utilizando una ilusión óptica, ya que se colocaron en delgadas barras puestas en ángulo, de tal manera que los propios escalones ocultan las barras a la cámara.
Esta disposición permite incluso mover la cámara, como se puede ver la primera vez que David sube los escalones.