Los flecos pueden consistir en cordones de tela retorcidos o trenzados o en hilos sueltos de algodón, seda, lino o tiras de cuero.
Los flecos son recursos que se emplean en decoración del hogar o como una pieza de pasamanería.
Se emplean como adorno de cortinas, fundas, colchas, alfombras, cojínes, etc.
Sus aplicaciones son muy amplias introduciéndose en zapatos, botines, sandalias, vestidos o cazadoras entre otras.
Los flecos se cosen en los laterales de la prenda o el objeto dejando que cuelguen y que se balanceen con el movimiento.