Se llama fiebre del oro a un período de migración apresurada y masiva de trabajadores hacia zonas más rústicas en las que se ha producido un descubrimiento espectacular de yacimientos de oro.
Suele referirse en especial al que se produjo en California, Estados Unidos, en 1848 y que finalizó en 1960 aproximadamente.
Las fiebres de oro constituyeron un rasgo de la cultura popular del siglo XIX.
Los factores que indujeron a muchos a abandonar sus empleos y modos de vida convencionales en busca del oro son de variada índole: Curiosamente, pocos mineros se hicieron ricos, mientras que los proveedores de los mismos y otros comerciantes encontraron la fortuna gracias a estos procesos.
Estas son las zonas en las que se dio la fiebre del oro: