Otros se especializan en cortometrajes de una duración máxima definida.
En Latinoamérica y el Caribe estos eventos se han vuelto sumamente populares con el paso del tiempo.
[12] Por otro lado, algunos festivales -por lo general, los que aceptan menos películas y quizás no atraen a tantos "grandes nombres" en su público como Sundance y Telluride- no requieren el pago de una cuota de inscripción.
En contraste, algunos festivales pueden proyectar algunas películas que no forman parte de la competencia.
A tal efecto emergen nuevas variantes de la oferta ya existente; aumentando la popularidad del turismo cultural vinculado a los festivales de cine.
El turismo cinematográfico surge como una propuesta novedosa a dicha necesidad del consumidor, convirtiéndose rápidamente en una tendencia creciente; donde los festivales de cine se establecen como el principal atractivo del destino, complementado con los recursos turísticos locales, se genera una experiencia mas completa que atrae a diferentes perfiles de turistas.
El turismo cultural ha dejado de ser un nicho especifico para convertirse en una oferta integral completa.
Sin embargo; el concepto de cultura es amplio, ya que en diferente medida todo destino ofrece alguna oferta cultural; por esta razón es necesario especificar el turismo patrimonial que esta relacionado con visitar museos, monumentos, edificios civiles, militares, industriales o religiosos, centros históricos o parques arqueológicos y naturales, por otro lado se encuentran los eventos relacionados con la cultura tradicional como: fiestas patronales, encuentros folclóricos, ferias de arte, discos o libros, donde se agrupan los festivales de cine.
Desde el enfoque del nuevo turista, busca una experiencia integradora que convine la cultura, educación, novedad y socialización.
Es decir; son todas las motivaciones que lleva al viajero a consumir el turismo de festivales.
Se considera que los festivales de Cannes, Berlín y Venecia son los más importantes y prestigiosos del mundo,[3] recibiendo la denominación de "los tres grandes".
[15] Existen otros eventos cinematográficos de trascendencia en Norteamérica como los festivales de Sundance, Tribeca, South by Southwest, Nueva York, Woodstock, Montreal y Vancouver.
Los festivales celebrados en Berlín, El Cairo, Cannes, Goa, Karlovy Vary, Locarno, Mar del Plata, Montreal, Moscú, San Sebastián, Shanghái, Tallin, Tokio, Venecia y Varsovia están acreditados por la Federación Internacional de Asociaciones de Productores Cinematográficos (FIAPF) en la categoría de competencias.
[17] En los Estados Unidos, Telluride,[18] Sundance,[19][20] Austin,[21] South by Southwest y Tribeca, son considerados festivales significativos dedicados a las producciones cinematográficas independientes.
[23] Algunos de estos eventos se han centrado en destacar temas específicos, incluyendo tanto el cine convencional como el independiente.
Destaca las tendencias actuales de la producción cinematográfica y de vídeo internacional, con énfasis en obras que aún no han sido plenamente distribuidas a lo largo del país.
[37] El Lusca Fantastic Film Fest (conocido anteriormente como Puerto Rico Horror Film Fest) también fue fundado en 2006 y es el primer y único festival internacional de cine fantástico del Caribe con énfasis en producciones de ciencia ficción, fantasía y terror.
Otros eventos notables desarrollados en el continente asiático son los festivales de Hong Kong, Busan, Ankara, Dubái y Katmandú.
[40] Hay varios festivales de cine importantes que se celebran regularmente en África.