Felix Kersten (Tartú-Estonia: 1898 -f. 1960) fue un terapeuta alemán nacionalizado finlandés, médico personal de Heinrich Himmler.
Las atenciones se hicieron regulares, pues aunque los masajes no mejoraban el mal sí lo aliviaban.
Kersten llegó a sospechar, sin temor a equivocarse, que los mismos ribetes y situaciones de la maquinaria del terror impuesta por Himmler bajo la inmediata supervisión de Hitler hacían estragos en el mismo subconsciente del personaje y se reflejaba en estas dolorosas convulsiones nerviosas.
Himmler se hizo adicto a sus masajes y Kersten no le cobraba emolumentos por sus servicios.
Gracias a esta obligada convivencia, Kersten llegó a conocer muy bien a su especial paciente y pudo verificar el grado de sumisión e idolatría que este profesaba hacia Hitler, además de otros detalles tan personales como el grado de orden que tenía Himmler en su vida.
Kersten aprovechó esta instancia para salvar primero a algunos conocidos que habían sido hecho prisioneros de la Gestapo en Suecia y luego en Países Bajos.
Pero la poderosa influencia que ejercía Kersten sobre Himmler llamó la atención de Reinhard Heydrich, su lugarteniente, quien comenzó a investigarle, sospechó acertadamente que estaba manteniendo contactos con el enemigo y empezó a acosarle.
Heydrich intentó involucrar a Kersten con el pretexto de que un médico alemán no podía, por decreto, atender pacientes judíos.
Al día siguiente, aprovechando el diario tratamiento a Himmler y en un momento determinado le expuso su conocimiento de dicho plan.
Himmler, muy relajado por los masajes, al principio no captó la importancia de la conversación y repentinamente se hizo un silencio pesado en la oficina del Reichführer.
Kersten arriesgando su persona, instó al Reichführer a tratar el tema desde un punto de vista diferente y le insinuó que este tema le iba a acarrear un agravamiento de su mal si no lo posponía.
Heydrich no podía dar crédito cuando recibió la orden de postergar la deportación y sospechó inmediatamente de Kersten, este fue citado a su despacho en Bohemia e interrogado por Heydrich, quien quiso involucrarlo en la resistencia holandesa.
La idea del gobierno sueco era neutralizar la cada vez más creciente influencia de los aliados para que Suecia entrara en guerra con Alemania, cosa que el gobierno sueco no estaba dispuesto a hacer, sin embargo, tampoco querían echarse encima a los enemigos de Alemania.
Ya tenía tres aliados, pero fue precavido en tratar el tema directamente con Himmler, por lo que empezó a trabajarlo psicológicamente.
Durante el almuerzo, Kaltenbrunner sin poder disimular su odio hacia Kersten ,comenzó con sarcásticos comentarios que fueron abruptamente interrumpidos por Himmler y este le espetó:-"Escuche bien Ernst, si Kersten muere o le sucede algo, Ud., no sobrevivirá ni una hora al suceso, ¿me entendió bien?"-.
Himmler vio además en este contacto una salida hacia la luz, por medio del Conde Bernardotte.
Kersten comenzó a ser presionado por el gobierno sueco y después de meditar profundamente resolvió jugársela enteramente en la próxima reunión con Himmler.
En marzo de 1945, Kersten se reunió con Himmler y comenzó a instarlo a tomar las riendas del poder (sabía que si Himmler le daba la espalda, su muerte por el cargo de derrotista y traidor era segura).
Dicha reunión tuvo efecto casi a fines de abril cuando ya los rusos cercaban Berlín.
Himmler expuso sus motivaciones antisemitas y el representante junto a Kersten logró garantizar la vida de los judíos sobrevivientes.
Además, Himmler aprovechó el contacto de la Cruz Roja Internacional para contactar personalmente con el Conde Bernardotte y hacerle proposiciones de paz para que este se las transmitiera a los aliados.
Por este acto Himmler, que era el sucesor del Führer, fue considerado un traidor por Hitler y condenado a muerte.
En 1949, se instituyó una comisión sueco-holandesa para tratar el caso Kersten y después de una investigación extensa no solo se le reivindicó, sino que además fue condecorado por el gobierno holandés.
En 1953, se le otorgó la ciudadanía sueca y siguió ejerciendo por toda Europa con gran éxito.