[1] Ingresó en 1911 en la Colección Frick de Nueva York, actualmente abierta como museo público.
[2] Las circunstancias en que se realizó se conocen por las cuentas de gastos, incluyendo los gastos de albañilería ocasionados por la apertura de dos ventanas en la sala donde debía posar el rey y las reparaciones hechas en el recinto habilitado como estudio del pintor, que se hallaba en estado ruinoso.
Velázquez trabajó al mismo tiempo en un retrato del enano llamado el Primo, que se envió a Madrid en junio.
Todas estas cualidades son ahora más perceptibles gracias a que el cuadro fue sometido en 2009 a una limpieza de los barnices envejecidos que lo cubrían, efectuada en los talleres del Metropolitan Museum.
[5] De las copias conocidas la más estimable se encuentra en el Dulwich College de Londres, considerada antiguamente como la versión original del cuadro pintado por Velázquez hasta que en 1911 Aureliano Beruete se la atribuyó a Juan Bautista Martínez del Mazo, al asignar definitivamente a Velázquez la versión conservada en Nueva York.